Querido SanTa CloS:

Si, a mi me gusta llamarte Santa Clos, eso de Claus como que suena medio mamila jaja. Ok. El caso es, que te escribo por lo siguiente...sé que éstas son las únicas fechas del año en que la señora Clos te deja salir y por lo tanto es tanta tu felicidad que te da el síndrome del "yo pago-yo invito" y terminas dándole regalos a todo mundo, está bien, yo respeto, cada quien despilfarra su dinero como quiera jeje.

Yo creí en tí, como muchos niños lo hacen. Viví una hermosa fantasía hasta los 9 años, cuando una tía amargosa me contó (disfrutándolo morbosamente) con lujo de detalles, la forma en que mis papás dejaban los regalos que yo a tí te había pedido pero que tú no te dignaste a traerme, no importa, no me traume ni nada, pero juro que lo que inhaló tu reno y que le provocó que la nariz se le pusiera roja no provino de mí ok!. Ya cuando supe la veldá fingí por otros 3 años, así tenía mis regalitos seguros y mis papis eran felices con mi "inocencia", hasta que fuí sorprendida y el mito "Santa Claus it's coming to town" dejó de existir en mi casa.

Después me casé, tengo un esposo maravilloso, cocina como los dioses, es cariñoso, comprensivo, un amante muy tierno, pero como no hay nada perfecto en el mundo, él no es la excepción...

Es un caos total la convivencia!!!

Siempre trato de que su ropa esté limpia y oliendo bonito, la acomodo por colores, largo de la manga, tipo de cuello, etc., cada rato estoy recogiendo para que la casa no se vea sucia y huela rico. Pero él, siempre revuelve la ropa, siempre que llega deja la ropa fuera de la canasta, mueve los muebles para ver la tele, deja trastos en el piso...es un caos total!!!

Pero lo peor, viene en el baño.

Siempre compro cepillo de mango rosa para mí y azul para él, toalla café para mí y azul para él, osea, le escojo los colores "masculinos" para que no se confunda y de todos modos, termina secándose con mi toalla o lavándose los dientes con mi cepillo. Así que, en aras de el amor que te tuve durante 9 años de mi vida, te pido lo siguiente:

"Has a mi marido más inteligente, ordenado y observador, y por favor....que aprenda a diferenciar."

Mi carta salió a tiempo. Los duendes del Polo Norte al ver que yo era el remitente en chinga le llevaron mi carta a Santa, a los dos días tenía esta respuesta:

Mi muy querida MiTa:

Agradezco el recibir noticias tuyas después de tanto tiempo, ví como abusaste de la generosidad de tus papás y ni hablar de mi pobre reno, hasta la fecha algo quedó mal con él, la gente se sigue burlando de su nariz hasta en las canciones y tarjetas, por todo esto, decidí borrarte de mi lista de "niñas bien portadas" y no volví a interesarme por tí...hasta hace unos días. Estoy muy emocionado por tu carta, quisiera hacer caso a tu petición, durante 9 años me dejaste galletas con leche, pero no sé que tan complicado sea, de todos modos "haré lo posible" ok.

Ah, por cierto, hace días recibí otra carta, tal vez te interese, la transcribo tal cual:

Querido Santa Claus:

Gracias por todos los regalos modestos que me diste durante años, gracias por mi mejor regalo, mi esposa. Soy tan felíz! cuando llego a mi casa, ella siempre tiene comida para mí, no importa que sea de un restaurante, prefiero eso a cocinar yo.
Mi ropa siempre está limpia y acomodada, lo malo es, que soy indeciso y no sé a veces que ponerme, por lo tanto, saco algo y no me gusta y lo vuelvo a guardar...donde sea, eso vuelve loca a mi esposa, aparte que no puedo hacer nada porque ella siempre tiene miedo de que "ensucie o manche" mi ropa con algo que no pueda quitarse, es más, me dice con voz dramática: Ash, no tienes consideración de mí, como tu no desmanchas con el jabón zote que me da alergia", así que trato de cuidarme lo más que puedo. Amo tirarme en el sillón de mi casa, en calzoncillos y con un plato de comida chatarra, después de un arduo día de trabajo es lo más placentero que hay, pero no puedo ver la tv bien porque mi esposa tiene llena la casa de adornos ñoños, bonitos...pero ñoños, y por lo tanto, tengo que mover el sillón hasta alcanzar un ángulo cómodo para mí, claro, eso molesta a mi esposa. Es más, hasta en el baño hay conflicto, con tantos colores ya ni sé que es mío y que no, hay shampoos de todos olores, cepillos de todos colores....agh, termino hasta con dolor de cabeza. Pero no le digo nada, la quiero mucho y trato de cambiar lo que puedo, pero esta navidad quiero pedirte un regalo especial:

"Has a mi esposa más paciente, más humilde y considerada, menos obsesiva-compulsiva, y por favor....que aprenda a cocinar."

Fin de la carta...

MiTa ThinKinG: Damn!!!

Santa Clos: 1

MiTa: 0!

MiTa SaYs: No me importa! es a tí a quien el Niño Dios le roba escena en estas fechas!

.....ok, estoy ardida y qué! jajaja

Aquí MiTa en VaCaCioNes, se despide...

Cambio y Fuera!

Pd. En cuanto a la imagen: El Táser es un arma policial no letal que genera unos pulsos eléctricos (a poco no fue un buen deseo navideño? jaja)